Entre sus pasajeros estaban algunas de las personas más ricas del mundo, además de cientos de inmigrantes irlandeses, británicos y escandinavos que iban en busca de una mejor vida en Norteamérica. El barco fue diseñado para ser lo último en lujo y comodidad, y contaba con gimnasio, piscina, biblioteca, restaurantes de lujo y opulentos camarotes para los viajeros de primera clase. También estaba equipado con una potente estación de
telegrafía para uso de pasajeros y tripulantes y avanzadas medidas de seguridad, como los
mamparos de su casco y compuertas estancas activadas a distancia. Sin embargo, y debido a las obsoletas normas de seguridad de la época, sólo portaba
botes salvavidas para 1.178 pasajeros, poco más de la mitad de los que iban a bordo en su viaje inaugural y un tercio de su capacidad total.
Tras zarpar de Southampton el 10 de abril de 1912, el
Titanic recaló en
Cherburgo,
Francia y Queenstown (hoy
Cobh) en
Irlanda, antes de poner
proa al
océano Atlántico. A las 23:40 del
14 de abril, cuatro días después de partir y a unos 600 km al sur de
Terranova, el
Titanic chocó contra un
iceberg. La colisión abrió varias planchas del casco en su lado de
estriborbajo la
línea de flotación, a lo largo de cinco de sus dieciséis mamparos, que comenzaron a inundarse. Durante dos horas y media el barco se fue hundiendo gradualmente por su parte delantera mientras la
popa se elevaba, y en este tiempo varios cientos de pasajeros y tripulantes fueron evacuados en los botes salvavidas, algunos de los cuales no fueron llenados a su máxima capacidad. Un número muy elevado de hombres murió debido al estricto protocolo de salvamento que se siguió en el proceso de evacuación de la nave, conocido como "mujeres y niños primero". Justo antes de las 2:20 del
15 de abril, el
Titanic se partió por la mitad y se hundió por proa con cientos de personas todavía a bordo. La mayoría de los que quedaron flotando en la superficie del mar murieron de
hipotermia, aunque algunos fueron rescatados por los botes salvavidas. Los 710 supervivientes fueron recogidos de los botes por el transatlántico
RMS Carpathia unas horas después.
El naufragio del
Titanic conmocionó e indignó al mundo entero por el elevado número de fallecidos y los errores cometidos. Las investigaciones públicas realizadas en Reino Unido y Estados Unidos llevaron a la implementación de importantes mejoras en la seguridad marítima y a la creación en
1914 del
Convenio Internacional para la Seguridad de la Vida Humana en el Mar (SOLAS, por sus siglas en inglés), que todavía hoy rige la seguridad marítima. Muchos de los supervivientes, que perdieron todo su patrimonio en la tragedia, fueron ayudados gracias a la caridad pública, pero otros, como el presidente de la White Star Line
J. Bruce Ismay, fueron acusados de cobardía por su prematuro abandono de la nave y condenados al ostracismo social.
El
pecio del
Titanic fue descubierto el 1 de septiembre de 1985 por
Robert Ballard en el fondo del Atlántico Norte a una profundidad de 3.784 metros.
Los restos están muy dañados y sufren un progresivo deterioro, pero desde su descubrimiento miles de objetos del barco han sido recuperados del fondo del mar y están en exposición en numerosos museos del mundo. El
Titanic es quizá el barco más famoso de la historia y su memoria se mantiene muy viva gracias a numerosos libros, canciones, películas, exposiciones y memoriales.